domingo, 10 de mayo de 2009

La ruptura del pacto.


La eterna oscuridad estaba sumiendo a ciudad de Syón en el peor de los castigos, el olvido.

Las puertas estaban abiertas y no se oía nada al principio…La sala estaba  a oscuras, envuelta en la fría y espeluznante soledad de los tiempos…

Fílakos, último guardián de la paz entre los seres antaño llamados Celestiales, se arrastraba por el suelo intentando llegar hasta los pies de su padre Gabriel, rey divino de la ciudad de Syón. Puesto otorgado por la mano divina y mensajera de los cielos mas altos.

Fílakos, herido de muerte con una pierna y un brazo mutilados se arrastraba entre polvo y sangre hasta el trono de su padre que permanecía inmóvil. Iluminado únicamente por la suave luz de una antorcha apunto de apagarse.

 - Padre…padre… lo que temíamos ha ocurrido. Los caídos se han revelado, han roto el pacto de los cielos…Quieren salir de la ciudad…Todo se ha convertido en un campo de batalla y hay rumores sobre algunos caídos que han abandonado la ciudad…

 Gabriel permanecía inmóvil en su trono, mientras Fílakos a duras penas se aproximaba a él.

 -Padre… ¿Por qué no dices nada? ¿A caso no te importa? Si salen de la ciudad la oscuridad llegará hasta los humanos…

 Gabriel permanecía inmóvil. Su hijo Fílakos, llegó hasta el trono y con la ayuda de su espada logró incorporarse un poco para poder ver de cerca los ojos de su padre. El cuál permanecía inmóvil mirando hacia la puerta.

 -¿Por qué no haces nada padre?-  Contestaba asustado Fílakos.

 -Mi camino termina aquí…- La voz atronadora de Gabriel resonó en un leve susurrro- es el fin…no he pod…podido cumplir el pacto…perdóname hijo mío…- Gabriel cerró los ojos  y espiró.

-¡Padre! ¡Padre!- Fílakos se acercó a su padre para ver que le ocurría, enseguida se percató de que algo había sobre el pecho de Gabriel. Lo tocó con la mano que aún le quedaba intacta y se asustó temiendo lo peor. Cayó al suelo, pero el miedo que sentía hacía olvidar el dolor de sus heridas. Alargó su brazo y cerró los ojos. 

De entre sus dedos brotó un pequeño punto de luz, minúsculo como un grano de arena de un color celeste. Pronto se fue agrandando hasta crear una esfera que cabía perfectamente en su mano. Extendió la palma de su mano, abrió los ojos y la esfera se alzó sobre ellos. Entonces sus sospechas se confirmaron… había una espada clavada en el pecho de Gabriel, una espada que había acabado con la vida de su amado padre.

 -¡Noooooooooo…! ¡Padre! ¡Padre!- El llanto de desesperación e impotencia de Fílakos hizo huir a los caídos que saqueaban el palacio.

 Se incorporó e intentó con sus pocas fuerzas arrancar esa espada, pero de nada sirvió el esfuerzo… de la misma fuerza y resbalando en su propia sangre cayó al suelo. No podía levantarse, sus heridas le hicieron prisionero de esa sala que sería su lecho de muerte sin duda alguna.

Fílakos permanecía a los pies de su difunto padre…Su vida se iba apagando poco a poco…mientras no paraba de susurrar las mismas palabras una y otra vez…

 -Que los cielos nos perdonen…



martes, 5 de mayo de 2009

Un comienzo inesperado...

Muchos son los que me han hablado de esta afición, muchos son los que me han comentado que era una opción mejor y más útil que en lo que convertimos un día aquello llamado "Fotolog". Colgábamos fotografías e intentábamos expresar algo, nos hacíamos fotos inconclusas, o rebuscábamos en los brazos de nuestro queridísimo y recurrente amigo "Google" para actualizar y poder dejar una señal, una marca, algo... para que alguien nos escuchase y nos hiciera caso en las épocas de soledad. Cuando necesitábamos que alguien escuchase nuestras cosas, cuando queríamos gritar sin decir descaradamente "Te necesito".

Todo para contar que estábamos agobiados, que no sabíamos que hacer con algo, que estábamos pesimistas porque no teníamos rumbos aparentes... para contar lo fascinante que nos había parecido un libro o una película, para comentar que habías hecho amigos nuevos, para contar que te habías enamorado o simplemente que te habías levantado felíz porque el sol brillaba radiante en el cielo y un día más tenías la oportunidad de encaminar tus pasos hacia la meta elegida por ti.

Esos días pasaron, chapando a la mayoría de usuarios de la noche a la mañana sin motivo aparente. Sí, soy uno de ellos. Y es que después de aquello... pasé de escribir mis planteamientos, mi escritos, mis pensamientos... los "Retales de mi mente" en internet, pues para que acabasen siendo pasto de la papelera de reciclaje de cualquier servidor de mala muerte... pues pasé.

Pero tras muchos comentarios de usuarios, informáticos, amigos, compañeros de trabajo... casi sin saberlo yo mismo... he comenzado esta nueva etapa cibernética de mi vida, he comenzado este blog. Pues llevo varios meses planteándome la idea de "Un día me creo un blog. Pero cuando tenga claro que quiero hacer, cuando tenga tiempo o mejor cuando tenga ganas". Y nada... pasaba el tiempo y esta noche... sin pensarlo dos veces, entrando en el blog de una amiga de la que no sabía nada desde hacía bastante tiempo... me decidí a inaugurarlo.

No soy una persona de leer mucho vía on-line, reviso pocos foros, y blogs... para que voy a mentir... reviso alguno muy de vez en cuando. Por eso no tengo muchas esperanzas en que muchos de mis amigos se hagan seguidores asiduos del blog, pero bueno... tengo un lugar donde descargar los retales que salen de mi cabeza...

Creo que esta parrafada ya comienza a desvariarse demasiado y por lo tanto el comienzo inesperado de este blog ya ha sido anunciado y explicado pues... 

Hasta mas ver....